AJEDREZ Y EL CEREBRO
Los estudios han demostrado que hasta el 80% del desarrollo cognitivo tiene lugar en los primeros años de vida. El ajedrez va más allá de un deporte, una ciencia, un arte. El ajedrez ejercita ambos lados del cerebro y puede mejorar significativamente el rendimiento académico y las habilidades sociales de los estudiantes.
AJEDREZ Y MATEMÁTICAS
El ajedrez implica un número infinito de posibilidades, calculando múltiples variaciones y consecuencias, prediciendo su resultado e interpretando revelaciones sorprendentes. El ajedrez entrena las habilidades de visualización más allá del nivel necesario en matemáticas, quizás solo comparable a la geometría avanzada. Los niños entrenados en ajedrez son capaces de jugar múltiples juegos a la vez en simultaneas, o incluso con los ojos vendados.
AJEDREZ Y LECTURA
El proceso cognitivo del ajedrez es similar al de la lectura y requiere decodificación, pensamiento, comprensión y análisis. El ajedrez tiene su propio lenguaje para transcribir juegos, inculca la curiosidad intelectual y el interés por los libros para crecer en el juego.
AJEDREZ Y ARTE
El ajedrez permite que tu imaginación se vuelva loca con infinitas posibilidades en los 64 cuadrados. Puede pintar imágenes en su mente de posiciones ideales y, dependiendo de su estilo y personalidad, puede crear combinaciones hermosas y sorprendentes a su manera única.
AJEDREZ Y HABILIDADES SOCIALES
El ajedrez genera paciencia, nervios, fuerza de voluntad y concentración. La interacción social 1: 1 durante los juegos te facilita ganar confianza a medida que construyes nuevas amistades. Es un ejercicio de empatía adivinar los movimientos y planes de tus oponentes. Mejora sus habilidades sociales interactuando con otros mientras practica la ética y el buen espíritu deportivo.